*El ser humano puede ser peligroso cuando es vengativo,
pero no hay nada más peligroso que la venganza de un ser sobrenatural*
(Yurena)
Mire a mi alrededor, el cuerpo de mi amigo tirado en el suelo, el del maniático
vampiro que lo mato.
Me sentí mareada todo a mi alrededor daba vueltas y las palabras de Sack se
repetían en mi mente "Te amo Yuren, pero no dejes que eso arruine tu vida,
quiero que seas feliz y te enamores de otra persona, no importa quién sea
siempre tendrás mi apoyo".
-ha!- dije mientras saltaba de mi cama, alguien, no muy inteligente me había
tirado no un baso sino un balde de agua encima...-no- susurre mientras todas
las imágenes de lo que había pasado vinieron a mi mente.
-Yuren tranquila, estoy aquí-dijo mi padre mientras me abrasaba.
-Papa.. dime q..que S..sack es..está bien papa, dímelo por..favor.
-Yurena- dijo mi progenitor seriamente mientras tomaba mi cara entre sus manos-
Sack está muerto.
Un nudo se formo en mi garganta, hace sínico segundos mientras se lo preguntaba
tenía la esperanza de que todo fuera un mal sueño, pero escuchar decirlo de esa
forma de su boca fue peor que el balde de agua fría que me despertó.
Y así paso una semana, y con esa semana llegaron los cazadores....
Papa izo entran a un grupo de chicos y dos chicas a la sala, estaban vestidos
de negros, preparados como para sobrevivir en la selva, tenían cuchillas de
plata, de hierro con los típicos símbolos de los cazadores, eran cinco en total
aunque pude sentir que fuera de casa habían mas.
-Por favor chica dejarnos hablar a solas con el Señor Denis-que raro sonó eso
hace mucho que no llaman a mi padre por su nombre completo siempre es papa,
Den, o mi amor como le dice la babosa de mi madrastra-
-¿Disculpa?- dije mientras cruzándome de brazos y levanta una de mis cejas...
por algo era la sub-alfa, tenía todo el derecho de estar en ese lugar y
escuchar la conversación-tengo todo el derecho a escuchar esta conversación, yo
al igual que el "Señor Denis"- arrastre las palabras del nombre de mi
padre-quiero saber cómo mataron al Sack.
-¿Esta humana sabe el secreto?- dijo girándose asía mi padre, Diego que en ese
momento se encontraba tomando un zumo de naranja se empezó a atragantar se con
el liquido-¿Qué es tan gracioso?.
-Acabas de decirle humana a la hija del alfa- no me
molestaba que me dijera humana pero sí que con el aroma tan peculiar a
licántropo no pudiera creer que era uno.
-Avísenme cuando sepan quién mato a Sack- dije secamente mientras salía dando
un fuerte portazo a la puerta, que después de tantos golpes y que se rompieran
todas mi padre se avía decidido por una de metal, debido a eso el ruido fue
ensordecedor, al menos a mi mis agudos oídos.
Ese cazador era un idiota, no me quedara ahí a escuchar las cosas que iba a
decir, luego se las preguntaría a mi pelirrojo amigo, Diego, y cobraría
venganza.......
Segunda parte
*Una de las reglas primordiales de la vida es nunca dejarse cegar por el
odio, pero si no sabes de la existencia de esta o prefieres no leer el
reglamento, luego será demasiado tarde para cumplirla*
Al salir por la puerta me arrepentí, necesitaba esa información a toda
costa, estaba segada por el odio, pero no me importaba, aceptaría las
consecuencias a las que ese sentimiento me llevaría, ahora lo único que importaba
era vengarme, no solamente por mi amigo, no, ya no lo soportaba, siempre
viviendo a las sombra de ellos, solamente porque se creían mas fuertes, vivían
más años y su experiencia, de que les serví tanta experiencia si ni siquiera podían
usarla para el bien de su raza.
Ellos no solo habían matado a mi amigo sino que también a mi madre, asta
podía apostar que el mismo que mato a Sack la mato a ella, no lo soportaría, no
más, recuerdo las leyendas que me contaba mi abuelo en las que uno de ellos un
ser oscuro, de la noche, un nosferatu, o vampiro como prefieran llamarles,
mataban personas despiadadamente, siempre hubo problemas con ellos.
Siempre fueron el centro de atención, contrario de ellos nosotros los licántropos,
mantuvimos el secreto, protegimos a la humanidad, ellos se consideraron dioses,
olvidándose que algunos de ellos fueron lo que ahora llaman "simples
humanos", olvidaron su verdadero ser, he escuchado tantas cosas en estos
años, he visto vidas desperdiciadas, solamente para ser uno de ellos, ¿pero de qué
sirve en realidad? ¡Si lo único que consiguen es ser un ser despreciable!, tal vez
de lo único que me arrepiento es de no haberme dado cuenta de todas esas cosas hasta
ahora....
-Yurena creo que exageraste un poco con el chico-escuche a Diego.
-Sí creo que si- creo que hasta yo me asombre más que Diego, una de las razones
yo nunca daba el brazo a torcer, dos mis vos había sonado lejana, muy lejana-
-Yurena, ¿te encuentras bien?- que ignorante, pensé.
-Sí, mejor que nunca, un vampiro mato a mi mejor amigo y podría ser el
mismo que mato a mi madre y un estúpido cazador me cree humana solamente por el
hecho de ser mujer.
-Espera, espera, espera, ¿has dicho que podría ser el mismo qué mato a
mi madre?.
-Sí, podría ser una gran posibilidad ¿no crees?.
-No, ya que no te has quedado a escuchar lo que hablamos, y podrías haberte
quedado cerca, con nuestros oídos podrías haber escuchado, pero no doña
orgullo....
-Diego no tengo todo el día, si te vas a poner infantil no quiero
escucharte- puso lo ojos como platos, de seguro no se esperaba esas palabras de
mi.
-¡Yurena crees que estoy poniéndome infantil!, ¡si no te hubieras ido sabrías lo que te
tengo que contar ahora!- suspiro, seguramente intentando no seguir gritándome, tal
vez había exagerado al hablarle así, Diego era mi mejor amigo, no tenía la
culpa de lo que me pasaba
- Yurena, te conozco desde que tengo uso de memoria,
se que planeas algo más, si no fuera así estarías en tu habitación llorando
como Adela, estoy segura que quieres venganza y no eres la única.
Mire hacia los arboles, en realidad, solo perdí mi mirada en la nada, a
veces me ayudaba a pensar, Diego, el no era una persona vengativa, era un gran
amigo, podía llegar a ser molesto, divertido y ni hablar de la ves que se tomo
unas 20 cervezas... sonreí, esos eran tiempo perfectos, pero todo cambia, como
las personas, cual abra sido el pasado de ese vampiro para matarnos de esa
forma... no, no podía ser compasiva ahora.
-Solo quiero saber que dijo el cazador Diego, ambos sabemos que no
tienes el coraje para matar a alguien.
-Igual que no lo hubieras tenido tu, pero la verdad no se ahora- lo mire
a los ojos, el me conocía bien y yo no me estaba comportando como siempre-no
digo que vaya a matar a ese vampiro Yuren, solamente sé que no lo haces solo
por él, sé que no estás vengando solo ha Zack- no le conteste el tenia razón-
te ayudare a llegar hasta él, Sack era mi amigo, mi único ha decir verdad,
nunca me lleve bien con los otros chicos de la manada lo sabes, y no creo tener
un odio tan grande a los vampiros como lo has de tener ahora, pero soy tu mejor
amigo Yuren y te voy a ayudar.
-Gracias Diego, y realmente no lo sé, no creo necesitar tu ayuda.
-Bien, ambos sabemos que estas cegada por el odio, y yo soy el único
cuerdo aquí- levanta una ceja incrédula-bien, el único que no está cegado por
el odio- entrecerré mis ojos, si, Diego no era vengativo, definitivamente.
-Y si se puede saber, que ganas con todo esto- iba abrir la boca pero lo
pare- y no vayas a decir que es porque soy tu mejor amiga, si fuera así no estarías
diciéndome que haga esto haciendo esto.
-Bien- suspiro- el vampiro se llama Isaac, es un... demente, se enamoro
de una licántropa, para ser mas específicos de tu madre- abrí mis ojos de la impresión-
si de tu madre, pero ella se fue con tu padre, el se entero que ella murió y
cree que fue culpa de tu padre, que él no la amaba, el sufrió mucho, sabe que
tu madre tuvo una hija y quiere hacerle sentir a tu padre lo que el sintió.
-Por eso en el bosque intento matarme a mi…
-Exacto, y espero que te des cuenta porque quiero que lo mates- lo mire
expectante- porque no quiero que él te mate a ti primero… ¡por dios como puedes
dudar de nuestra amistad!.
-No lo hago- dije mientras lo abrazaba fuertemente-solamente quería
saber porque de repente te interesaba que matara a alguien.
-Tomare eso como un Te amo y eres el mejor amigo del mundo- reí el nunca
iba a cambiar y tampoco quería que lo hiciera…
(Narrador externo)
Serró los puños fuertemente mientras golpeaba la mesa y tiraba todo lo
que se encontraba sobre ella.
-¡Isaac, entiendo que quieras venganza, pero no puedes ir matando
licántropos por ahí, un día de estos te atraparan, y sabes que no podre hacer
nada para ayudarte!.-su vos era áspera y gutural, su vos era como el gruñidos
de un animal salvaje, su aspecto joven y atractivo, seguramente el sueño de
cualquier tonta adolecente y la pesadilla de quien supiera su verdadera naturaleza-
además, me has dicho que no la mataste, ¿Cómo que no la pudiste matar?.
-No puede, ya te lo dije, es la copia de su madre y… verla llorando de
es manera me izo recordar aquella vez que la ice llorar a ella- el vampiro se
lo quedo mirando seriamente, Isaac podía ser tan ingenuo.
-Isaac, ¿si te das cuenta que te estás enamorando de ella al igual que
su madre?
-¡¿Qué?! Eso nunca, ¡acaso te has vuelto loco!- grito, esta vez
sin soportar las dolorosas palabras de su partenaire*.
-Solo recuerda Isaac cuando te diste cuenta que estabas
enamorado me Marisol ya era demasiado tarde, no quiero que se repita la misma
historia.
Isaac no contesto después de todo su colega siempre tenía
la razón y eso era lo que más lo frustraba.
*Partenaire:Compañero,pareja: "no pudo jugar porque su partenaire no acudió".
Tan tan tan, ¿cómo me quedo?, se que no he subido en mucho
tiempo esta historia pero no sabía de dónde sacar inspiración, espero que les
guste y que no tenga tantas faltas ortográficas, ¿vierón que use el diccionario?, ya estoy empezando a organizarme y creo que me ha vuelto la inspiración,
espero que lo disfruten, saludo.
Pd:es la única imagen que encontré, aunque no se parecen a mis personajes ;D
-Agus-
